Cuando se escucha la palabra cambio climático es usual relacionarla con medio ambiente, aumento de temperatura, calentamiento global y contaminación ambiental, lo cual es correcto, sin embargo el cambio climático constituye una nueva e importante amenaza para la salud, y modifica la manera en que debemos considerar la protección de las poblaciones vulnerables. De hecho, los últimos resultados de la COP20 lo confirman, ya que se estableció de manera expresa la importancia de las cuestiones relativas a la salud, lo cual mereció el agradecimiento de la Organización Mundial para la Salud (OMS).
Es así que, continuando con nuestro trabajo de educación y comunicación en la ruta a la COP21 en Paris, el equipo de @LaRutadelClima cubrió el I Congreso Internacional en Salud Ambiental realizado del 11 al 14 de marzo en el auditorio del Colegio de médicos del Perú. El objetivo del congreso fue fomentar nuevos aportes a la generación de Políticas Ambientales y de Salud, tanto públicas como privadas, así como estrategias de mejora en las áreas de Salud Ambiental y Desarrollo Sostenible de las comunidades, con énfasis en la Salud Materna e Infantil.
Bajo una dinámica de ponencias, mesas redondas y plenarias de conferencistas internacionales de Argentina, Brasil, Uruguay, Colombia, Chile, Estados Unidos y Reino Unido; así como ponentes peruanos, representantes de universidades prestigiosas y de organismos internacionales como la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS), Global Alliance on Health and Pollution (GAHP), entre otros, se discutieron temas de salud ambiental como contaminación por plomo, mercurio, contaminación atmosférica, agua y suelos, salud materna e infantil, reciclaje informal, salud, cambio climático y poblaciones vulnerables, entre otros.
Entre los participantes hubo profesionales de la salud, médicos, enfermeras, tecnólogos, investigadores, ingenieros, meteorólogos, veterinarios, biólogos, estudiantes, voluntarios y representantes del Ministerio del Ambiente y Ministerio de Salud del Perú. Si bien no se contó con una participación masiva de la sociedad civil, es evidente una mayor importancia a este crucial tema, abordado en conjunto desde diferentes sectores, lo cual se ve reflejado en una asistencia de profesionales de distintas ramas en un tema antes considerado como un asunto reservado para los médicos. Esto nos demuestra que un trabajo cooperativo, abierto al diálogo y al intercambio de experiencias es el camino correcto para lograr objetivos comunes en materia de salud ambiental y el tan buscado desarrollo sostenible de nuestros países.
Es necesario termina agradeciendo la gran predisposición de la comunidad médica por permitirnos participar, hacer visibles sus resultados en investigaciones, responder a las consultas y organizar este tipo de eventos que aportan a la sociedad y ayudan a prevenir enfermedad debida a factores ambientales que ya nos afectan y que en el futuro si no hacemos algo, nos traerán enfermedades, epidemias, desastres naturales y mucho más de lo que ya hemos vivido.